2 DE AGOSTO DE 1810 QUE MARCÓ LA INDEPENDENCIA DE ECUADOR
Motín del 2 de agosto de 1810
El motín del 2 de agosto de 1810, también llamada masacre del 2 de agosto de 1810, fue una revuelta ciudadana y una rebelión de prisioneros ocurrida en Quito, capital de la entonces Audiencia y Cancillería Real de Quito, en la que un grupo de patriotas asaltó el Real Cuartel de Lima con la intención de liberar a los prisioneros que habían participado el año anterior en la Primera Junta de Gobierno Autónoma de Quito y que habían sido acusados de crímenes de lesa majestad para los cuales el fiscal pedía pena de muerte o prisión permanente.
El pueblo quiteño sublevado asaltó dos cuarteles y una cárcel y las autoridades realistas respondieron ejecutando a los presos que no habían huido y ordenando la salida de las tropas. Luego, la lucha se extendió a las calles de la ciudad. Hubo tumultos y muerte de los españoles más odiados. Entre 200 y 300 personas (1% de la población de entonces), perdió la vida en la refriega. El saqueo de las tropas realistas produjo pérdidas valoradas entre 200 y 500 mil pesos de la época. La matanza como represalia, ordenada por el gobernador realista, Manuel Ruiz Urriés de Castilla, Manuel Ruiz Urriés de Castilla Pujadas, conde de Ruiz de Castilla, tuvo amplia repercusión en toda la América hispana, como un acto de barbarie y justificación de la «Guerra a Muerte» decretada por el libertador Simón Bolívar.
Se conoce como proceso revolucionario de Quito a la serie de eventos ocurridos entre 1809 y 1812 en el territorio de la Real Audiencia de Quito que son considerados como la semilla de los movimientos independentistas que terminaron por conformar la actual República del Ecuador. Está constituido por los capítulos históricos conocidos como Primer grito de Independencia, Masacre del 2 de agosto de 1810, Segunda Junta de Gobierno y el Estado de Quito.
La ciudad de Quito, como capital de la Presidencia y Real Audiencia homónimas, había sido el escenario de varias revueltas políticas y levantamientos contra los españoles, a quienes se llamaba popularmente como chapetones, durante gran parte de la dominación colonial. En 1592 los quiteños se levantaron en la llamada Revolución de las Alcabalas, causada por los impuestos de aduana que acababan de aprobarse. Otro motín conocido como Revolución de los Estancos tuvo lugar en 1765 por motivos similares. Por su parte, la población indígena también protagonizó varios motines contra la Corona a lo largo de los siglos.
La invasión napoleónica a España y la consecuente abdicación del rey Carlos IV en favor de su hijo Fernando VII, quien a su vez abdicó en favor del emperador francés Napoleón I, creó caos y confusión en España y sus colonias a partir de 1808. Mientras los Borbones se entregaron a Napoleón luego de la entrevista de Bayona, el pueblo de Madrid se sublevó, y en toda España se formaron Juntas, gobiernos locales populares que decían defender a su país y su Rey.
La Junta Suprema Central, que gobernaba en nombre de Fernando VII, funcionó a partir de septiembre de 1808 en Aranjuez y Sevilla, declaró en enero de 1809 que las colonias americanas eran parte de la nación española, dando paso, sin advertirlo, a la posibilidad de que en América se formaran juntas similares. Esta misma Junta, sin embargo, mostraría su preocupación por los nacientes movimientos independentistas y ordenaría su represión con la misma saña que luego lo haría el rey Fernando VII tras regresar al trono en 1813. No obstante, las Juntas de Gobierno de América prenderían la mecha de la independencia en toda la región.
Esta coyuntura de sucesos, el ejemplo de los propios españoles, la influencia de la Revolución francesa, de la independencia de los Estados Unidos, y las ideas de la Ilustración impartidas en Quito por Eugenio Espejo mediante la Escuela de la Concordia, inspiraron los planes quiteños para formar una Junta Soberana.
Primera Junta de Gobierno (1809)
La primera Junta de Gobierno Autónoma fue un gobierno ejecutivo que se creó en el territorio de la Presidencia de Quito a raíz de la invasión napoleónica a España, y que dio inicio al proceso revolucionario que se extendería hasta 1812. Esta revolución, tuvo lugar en la ciudad de Quito el 10 de agosto de 1809, después del derrocamiento de Manuel Ruiz Urriés de Castilla y Pujadas, I conde de Ruiz de Castilla, presidente de la Real Audiencia de Quito, por un grupo de sublevados que formaron una junta de gobierno provisional. A este evento se le conoce en el Ecuador y otros países de la región como Primer Grito de Independencia Hispanoamericano, debido a que constituyó el inicio del proceso de emancipación de Latinoamérica. Además, a los gestores de este hecho se les conoce como los patriotas del 10 de agosto de 1809. De los participantes en la sonada, 32 acabaron siendo encarcelados y luego asesinados por órdenes de Ruiz de Castilla en el Motín del 2 de agosto de 1810.
Esta revolución fue liderada por un grupo de intelectuales; doctores, marqueses y criollos residentes en la ciudad de Quito, se instaló en el poder bajo la administración de quiteños y no de españoles peninsulares. Los sucesos de Quito se extendieron desde 1809 a 1812 y tuvieron amplia repercusión en toda la América Latina y fueron el germen de la independencia .