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La investigación por el femicidio de la subteniente Aidita Ati, en el Fuerte Militar Napo, en Orellana, continúan.

La investigación por el femicidio de la subteniente Aidita Ati, en el Fuerte Militar Napo, en Orellana, continúan.

el periodico digital PRIMICIAS accedió a la versión que entregó Marco Guerrón, comandante de esa Unidad, dos días después del crimen. Aidita Ati fue asesinada la noche del 28 de junio de 2024, en su dormitorio en la Villa de Oficiales, en el Fuerte Militar. Cuatro militares pertenecientes a esa dependencia son procesados por presunto femicidio.

El 30 de junio, Marco Guerrón Gutiérrez, comandante de esa Brigada del Ejército, rindió una versión libre y voluntaria sobre el caso. El oficial confirmó que el día del femicidio hubo una ceremonia militar en honor a dos uniformados que ascendían.

Según Guerrón, luego de la ceremonia ordenó el reinicio de las actividades normales de trabajo. Además, autorizó que ese día haya un «rancho (comida) de camaradería». El almuerzo habría terminado a las 14:00 y los militares debían volver a su trabajo habitual. Un quinto militar habría tenido contacto con la subteniente Aidita Ati antes del femicidio. Las inconsistencias Según las primeras investigaciones de la Fiscalía y de la Policía, el festejo por el ascenso de los militares no concluyó en el «rancho de camaradería», sino que la reunión se alargó e incluyó el consumo de alcohol. Ati habría participado del festejo, hasta cerca de las 18:00, cuando se retiró a su habitación, con la compañía de cuatro oficiales, que ahora son procesados por femicidio: Mayor Xavier Alejandro Pinoargote Vázquez Mayor Freddy Santiago Quintanilla Ayala Teniente John Jairo Mena Mendoza Subteniente Ángel Eduardo Jiménez Orozco

En su versión, Guerrón informó que mientras de desarrollaba la fiesta, él estuvo en una reunión -entre las 15:00 y las 18:00- con los oficiales a cargo del presupuesto de la Unidad. Según el Comandante, en esa reunión participaron Pinoargote y Quintanilla, y la misma no tuvo ningún receso, por lo que estas personas no habrían salido ni un solo momento hacia el lugar dónde ocurría la fiesta. Esto difiere de otras versiones recogidas por la Fiscalía, en las que se asegura que los dos oficiales, junto a Mena y Jiménez, sí estuvieron en la fiesta y luego llevaron a Aidita Ati a su habitación, en el carro de Pinoargote. Las cuatro coincidencias entre el femicidio de la subteniente Aidita Ati y el de María Belén Bernal Además, Guerrón contó que -luego de la reunión de presupuesto, cerca de las 18:30- Pinoargote y Quintanilla se acercaron a él y le informaron que la merienda que habían planificado fuera de la Unidad no se iba a dar: uno de los homenajeados se sentía mal porque «le habían dado unas copas, y en la tarde le habían dado licor». Esta respuesta se contradice a lo dicho por el propio Guerrón en el inicio de su versión. El oficial había informado que en la ceremonia solo se sirvió una copa pequeña de un cóctel, a manera de brindis y que él no autorizó ni conoció del consumo de más bebidas alcohólicas. El femicidio de Aidita Ati Según las versiones de los propios procesados, los cuatro oficiales llevaron a Ati a su habitación, le sacaron varias prendas de vestir y le aflojaron el botón del pantalón para que estuviera cómoda.

Luego se habrían ido del lugar. Guerrón dijo en su versión, que al día siguiente -el 29 de junio de 2024- a las 19:30, la directora del Hospital Básico que funciona junto al Fuerte Militar, le comunicó que Aidita Ati habría fallecido en su habitación. Pero, esto tampoco coincide con los hechos. El cuerpo de Ati habría sido encontrado por una compañera a las 06:40 del 29 de junio. Y un poco más de dos horas después, el propio Guerrón habría llamado al papá de la víctima a informar sobre su deceso, según la defensa de la víctima.

Paola Montoya, abogada de la familia Ati, dijo que Guerrón le habría dicho al padre de Aidita Ati que su hija murió por asfixia, provocada por su propio vómito, debido al consumo de licor. Los cuatro oficiales procesados estuvieron en la habitación de la subteniente Aidita Ati, la noche del crimen Aunque, en el informe de la autopsia realizada la tarde del 29 de junio de 2024 en Lago Agrio, el técnico forense determinó que se trató de una muerte violenta, a causa de una «asfixia mecánica por politraumatismo». Además, la autopsia detalló que el cadáver de Aidita Ati evidenciaba huellas de violencia, como hematomas en la cabeza, cara, cuello, tórax, miembros superiores y miembros inferiores.

El informe recogido por el personal de la Dinased, también reporta que en la autopsia se hallaron hematomas en los genitales, además de «un líquido de color blanquecino»b https://www.primicias.ec/noticias/seguridad/femicidio-aidita-ati-version-jefe-militar-inconsistencias/

Los cuatro militares procesados ampliarán su versión este miércoles 10 de julio

Los cuatro oficiales no cumplen prisión preventiva. 

Ecuavisa tuvo acceso a las versiones de los cuatro militares procesados por el femicidio de la subteniente del Ejército, Pamela Ati, ocurrido entre la noche del viernes 28 y la madrugada del sábado 29 de junio en un cuartel militar de la provincia de Orellana. Los involucrados describieron los últimos días de vida de la joven.

Los cuatro oficiales, quienes no cumplen prisión preventiva, fueron convocados por la Fiscalía General del Estado (FGE) para que amplíen su versión este miércoles 10 de julio, en Orellana.

Lea también: Caso Pamela Ati | Cuatro versiones difieren en aspectos como la hora del deceso y la ubicación de dos oficiales

El 29 de junio, cuando la oficial fue hallada sin vida, los mayores Freddy Quintanilla y Xavier Pinoargote coincidieron en que no habían estado en la reunión del día anterior donde los militares bebieron licor. Adicionalmente, las versiones de ambos encajaron al indicar que pasaron por el lugar de la celebración y retiraron a la subteniente Ati con la ayuda de otros dos oficiales para llevarla a su habitación.

Quintanilla indicó:

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El subteniente Jiménez le sacó los zapatos, el teniente Mena le aflojó el cinturón y los dos oficiales le pusieron de lado y el mayor Pinoargote le colocó una almohada en el costado para que quede bien acomodadita.

De su lado, Pinoargote señaló:

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Yo le coloqué la almohada en su espalda (…). El teniente Mena aflojó el botón y vimos que esté descansada y estable (…). Permanecimos en la habitación no más de cinco minutos.

Sobre la puerta de la habitación, Pinoargote dijo que quedó sin seguro.

Revise además: Caso Pamela Ati | Los oficiales procesados serán valorados psicológicamente

Los otros dos oficiales, el subteniente Ángel Jiménez y el teniente Jhon Mena, también dieron su versión.

Mena no mencionó nada con respecto al botón.

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Yo le zafé el cinturón del pantalón para que esté más relajada para descansar.

Jiménez, en cambio, aseguró que Ati «se encontraba mareada, pero consciente».

Por estas mismas versiones se supo de un quinto oficial que vio con vida a la víctima: el subteniente Luis Fierro, quien no está procesado. Él mencionó:

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Durante la tarde del 28 de junio la subteniente Ati me escribió mensajes de WhatsApp, porque me llevo con ella. Me indicaba que se encontraba ingiriendo bebidas alcohólicas en el sector del Cemaflu, a lo cual me decía que le vaya a ver.

Agregó que fue a verla dos horas después, alrededor de las 18:30 del viernes 28 de junio, pero ella ya no estaba. Ahí -señaló- se encontró con el mayor Pinoargote y este le pidió que verifique si estaba acostada.

Fierro agregó:

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Me dirigí a la pieza, le golpeé la puerta tres o cuatro veces repetidamente. Al notar que no había ninguna respuesta, procedí a abrir la puerta para verificar si mi compañera se encontraba en la pieza (…). Sí se encontraba recostada en la cama. En ese momento procedí a cerrar la puerta y dirigirme al vehículo para nuevamente ir a la prevención y hacerme cargo de mi guardia.

El subteniente dijo que tardó entre 10 y 15 segundos en el dormitorio.

La próxima persona en ver a Ati, pero ya muerta, fue la capitán María Vaca, la mañana del sábado 29 de junio. Ella manifestó que alrededor de las 06:30 golpeó la puerta de su habitación, pero no abría. Dijo que pidió ayuda, pero seguía «sin responder».

Vaca añadió:

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Le abrimos la puerta y verificamos que ella no contestaba. Nos fijamos en los pies, los tenía morados y mi compañero verificó que no estaba respirando.

Tanto Fierro como Vaca también fueron convocados a ampliar su versión. Ellos acudirán a la FGE el lunes 15 de julio.

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