Alrededor de 1.000 personas de la parroquia Simiátug ayudaron el jueves a apagar un incendio que habría comenzado en la casa de la familia Toapanta, contó Marco Vinicio Ayme, profesor de esta parroquia de la provincia de Bolívar.

Él consideró que el viento y el material con el que setán construidas las casas, tapial (se elabora con tierra pisoteada y paja) y madera, ayudaron a que las llamas se extiendan a otras dos viviendas.

Ayme contó que los pobladores usaron baldes de agua, extintores, tierra e incluso trasladaron agua en camionetas desde un río cercano. Así evitaron que el incendio avance a otras casas.

Luego llegaron los bomberos de Guaranda para apagar completamente las llamas. (I)